El queso tierno y sus beneficios

¿Qué es el queso tierno?

La principal característica del queso tierno es que no es un queso envejecido, pues su tiempo de maduración es corto (entre 15 y 30 días) cuando lo comparamos con otros tipos de quesos.

El proceso de elaboración consiste, primero, en cuajar la leche a una temperatura que oscila los 35ºC durante cerca de 45 minutos para, después, separarla del suero. Cuando ya tenemos el queso tierno listo, se procede a moldearse, pensarse y salarse.

Lo que se consigue con el tiempo de maduración de 30 día es crear un mayor contenido en agua, lo que a su vez reduce la cantidad de grasas, uno de los beneficios más interesantes del queso tierno. Curiosamente, años atrás el queso tierno se elaboraba solo en otoño y primavera.

Hoy en día, el queso tierno se elabora durante todo el año y para ello se emplea leche de oveja, además de fermentos lácteos naturales y autóctonos. Estos factores crean un queso tierno sin corteza que, al pasar el tiempo de maduración, se vuelve ligeramente amarillo.

Beneficios del queso tierno

Todas las características que conocemos del queso tierno hacen que este sea un producto equipado con muchos nutrientes y vitaminas esenciales para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Destacan las dosis altas en calcio, fósforo y vitamina D del queso tierno.

Veamos cuáles son todos los beneficios que tiene incluir este alimento en nuestra dieta.

1. Es rico en proteínas y bajo en grasas

El queso tierno suele aconsejarse a los deportistas y a las personas interesadas en cuidar su línea porque, además de ser un producto rico en 26 gramos de proteínas, es muy bajo en grasas debido al alto porcentaje de leche de oveja y el tiempo de maduración de hasta 30 días.

Estas cualidades del queso tierno permiten aumentar la masa muscular sin repercutir en el índice de grasa corporal. Como encontrar un alimento con estas características no es fácil, el queso tierno es una opción excelente para aquellas personas físicamente activas.

2. Contiene dosis altas de calcio y fósforo

El queso tierno es también un producto equipado con minerales esenciales para fortalecer y asegurar el buen funcionamiento de nuestros huesos y dientes. Para que nos hagamos una idea, si un adulto necesita 950 mg de calcio, consumir queso tierno nos aporta 470 mg.

Además, el fósforo es otro mineral importante para prevenir enfermedades típicas de la edad avanzada o la osteoporosis. Por suerte, el queso tierno actúa como un escudo potente contra estas afecciones si solamente consumimos unas raciones pequeñas todos los días.

3. Es menos calórico que otros quesos

En otro punto hablábamos del bajo contenido en grasas del queso tierno. Pues bien, este es un punto a favor relacionado con la baja cantidad de calorías que tiene cuando lo comparamos con otros tipos de quesos, y es aconsejable si estamos siguiendo una dieta hipocalórica.

Por eso, podemos elaborar platos muy sabrosos, suaves, saludables y equilibrados nutricionalmente si los complementamos con un poco de queso tierno. Elegiremos el formato que más nos guste y disfrutaremos de las muchas ventajas que tiene consumir este queso.

4. Tiene un alto contenido en vitaminas A y D

Una manera indispensable de ayudar a que nuestros huesos absorban el calcio y el fósforo es aportando vitamina A y D al organismo, que podemos obtener del sol y de otros alimentos. Lo mejor de todo es que el queso tierno contiene estas vitaminas esenciales en cada bocado.

Las estadísticas nos cuentan que consumir un poco de queso tierno todos los días ya nos permite cubrir el 15% de la cantidad diaria recomendada de vitamina A y D. ¡Todo un acierto cuando lo que necesitamos es darles más fuerza y bienestar a nuestros dientes y huesos!

Además, la vitamina A también es la responsable de conseguir que nuestros ojos puedan ver bien y que las membranas mucosas, la piel y los tejidos blandos y óseos se formen y se mantengan en perfecto estado. Por eso, tomar queso tierno logra reforzar el sistema inmune.

5. Es un queso más digestivo

Algunos quesos se pueden volver difíciles de digerir por su alto contenido en lácteos, sobre todo cuando pensamos en quesos más curados. Sin embargo, este no es el caso del queso tierno, gracias a que la leche de oveja contiene mucha menos lactosa que la de vaca.

Por eso, si los lácteos suelen convertirse en un problema a la hora de consumirlos, pero nos encanta el queso, este producto puede ser una opción saludable y fácil de digerir debido a su bajo contenido en lactosa y a su alto contenido en agua, para favorecer el tránsito intestinal.

Conclusiones

El queso tierno es uno de los quesos más nutritivos y deliciosos que incluir en nuestra dieta, incluso cuando queremos ganar masa muscular o perder peso. Para notar todas las cualidades de su textura, es aconsejable disfrutar del sabor cremoso a temperatura ambiente.

A cambio, nos aprovechamos del gran aporte nutricional del queso tierno, rico en proteínas y altas dosis de calcio para proteger nuestros dientes y huesos y asegurar la salud de nuestros músculos. Gracias a las vitaminas A y D, podremos evitar afecciones como la osteoporosis.

Por último, el bajo contenido en sodio del queso tierno nos permite consumir el queso tierno sin tener que preocuparnos tanto por nuestra tensión arterial, por complicaciones renales o por problemas del corazón.

Si a todo esto le sumamos lo fácil que es de digerir por su bajo contenido en lactosa, el queso tierno se vuelve una gran opción para potenciar el sabor de nuestros platos, diariamente.